Imaginen las virtudes de las Estancias y antiguas casas de campo elevadas a categoría de lujo: acá se sabe combinar el esplendor rural con las comodidades de la vida y el saber hacer de las cosas. Completa reclusión y comunión con la tierra.

Luciérnagas que te rodean, el croar de los sapos, el fogón al atardecer tomando una copa de vino o una cerveza. Comer un asado bien argentino o platos gourment con ingredientes naturales. Probalo.

Estas Estancias lo ofrecen todo: producción local de alimentos llevados directo a tu mesa, privacidad total, actividades guiadas o a la carta, acceso a la naturaleza, vistas panorámicas, cotos de caza, golf, polo, pesca y exclusivas catas de vino. También esta experiencia te la merecés…